RESISTIR 🍃 . Sostenerse recio ante los embistes de la vida. Como resumir todo este tiempo en el que no que convivido mi día a día con vosotros. Ha
sido un tiempo de esfuerzo máximo, con un éxito profesional brutal y un proyecto extra que ha sido como tener un hijo. Seré sincera, en algún
momento os he echado de menos, pero ha sido tal la dedicación a cada sueño, que apenas había silencios como para poder pensar en volver.
Y de repente, todo se frenó. El mundo paró y creo que como sanitaria me debía en parte a mi familia y por otro lado no podía dejar de ayudar. Noches
interminables fabricando geles caseros en el laboratorio, atender sin mascarilla ni medios, llevar las medicaciones a domicilios y ayudar a todas esas personas que requerían principalmente cariño.
Dejé la consulta presencial totalmente de lado para ejercer en cuerpo y alma en aquello que pudiese ayudar y solo siento una inmensa felicidad en mi
interior.
Si tuviese que destacar algo sobre estos días a nivel familiar sería la relación tan especial que se ha creado con mi hija. Siempre sentí que pasábamos un tiempo de gran calidad pero diría que ahora es algo “único”. Siento como tener un piel con piel constante con ella, y veo en sus ojos como refleja el orgullo que siente hacía mi. No le puedo pedir más a la vida.
Y decidí regresar, compartir lo que es mi pasión en la vida, una filosofía, una forma de vivir, de sentir, donde la alimentación y las relaciones humanas no pueden separarse.
Gracias por cada mensaje que no he podido contestar de forma personal. Gracias por estar siempre ahí. Espero que disfrutéis y continuéis
aprendiendo de cada receta, de cada reflexión. Porque la comida real es importante, pero son los sentimientos los que realmente manejan los hilos
de nuestra vida. ¿Qué os parece si empezamos con una focaccia de calabaza? 🍃 .